Zoido en el “Tengo una pregunta para usted” universitario

Recogemos la información dada por el Diario de Sevilla
Juan Ignacio Zoido no rehuyó ninguna de las casi 40 cuestiones que le hicieron en la variante universitaria de "Tengo una pregunta para usted"
Juan Ignacio Zoido no echa de menos sus años de juez, en los que hizo doblete canario en Arrecife de Lanzarote y en La Laguna, pero sí añora su época de profesor en la Facultad de Derecho.

El portavoz del PP en el Ayuntamiento de Sevilla fue estudiante de Derecho de la promoción 1974-1979.

Cuando se licenció no había nacido ninguno de los alumnos que ayer lo asaetearon a preguntas en la versión universitaria de Tengo una pregunta para usted. Está habituado a ese trasiego generacional. La víspera había asistido a la graduación de su hijo mayor en la Olavide y horas antes del encuentro con los estudiantes llevó al pequeño a la guardería.

En el guión figuraban 33 preguntas, 32 enviadas por correo electrónico y una presentada in situ por Carlos Barriga García Mauriño minutos antes de que empezara a emitirse el programa en el aula 0.13. Más de tres horas de preguntas. Las del guión y las espontáneas que aparecieron en la prórroga. Como moderador actuó Jesús García Hernández, estudiante de la Escuela de Ingenieros y miembro de AUPA, la Asociación Universitaria para Andalucía que organiza la actividad que ayer se estrenó con Zoido.

Tres horas largas sin una sola mención al fútbol ni a la Semana Santa. De la Feria sí se habló. Uno de los alumnos, residente en Isla Mayor -Villafranco del Guadalquivir cuando era pedanía palaciega- contó con sorna que había "oído hablar de la Feria de Sevilla en Londres, en Barcelona y hasta en Salamanca, vine y no pude entrar en una sola caseta". Invitó a Zoido a la Feria de Isla Mayor. El concejal aceptó la cortesía y justificó la universalidad de la fiesta. "La marca Sevilla es más importante que Coca-Cola".

La primera pregunta la formuló de forma virtual Joaquín González García de Cossío, estudiante de cuarto curso de Farmacia: "¿El Metro sería uno de sus proyectos para seguir mejorando Sevilla?". La primera pregunta presencial se la hizo Samuel Santiago León, que no ocultó su fascinación por el personaje que tenía delante: "Me pasaría más de un día hablando con usted, señor Zoido".

Se habló del Alcázar y de la discoteca Q. A Zoido le llegaron más venablos dialécticos de la derecha que de la izquierda. "Estamos en la Facultad de Derecho, por favor, creer en el Estado de Derecho". Mostró cintura para sortear intervenciones peliagudas, como la del estudiante que le aseguró que no volvería a votar al PP "hasta que Aznar no reconozca que se equivocó al apoyar a Bush en la guerra de Iraq". Zoido tenía una pregunta para su interlocutor: "¿Tú no conoces a Aznar?". O el operario de Lipasam que sin ser universitario -"quiero hacer Psicología por la UNED"- se coló en el plató para reprocharle a Zoido que "siempre está criticando a los trabajadores de Lipasam". El edil dijo que no es de recibo que en su pueblo natal, Montellano, los contenedores estén soterrados, y a la vista junto a la Catedral.

Defendió la honorabilidad del Tribunal Constitucional y la humanidad de su compañero de Cámara autonómica Juan Manuel Sánchez Gordillo. Le preguntaron por las ayudas de IU a la Revolución cubana y a la III República. "Me parece muy bien que IU defienda la República, pero fuera del Ayuntamiento. En cuanto a las ayudas, me da igual el país y la ideología donde las manden, pero no son de recibo con las necesidades que tenemos. Las monjas no dan abasto en los comedores sociales. Debajo de mi casa duerme un hombre todas las noches. Eso no se puede consentir".

Le preguntaron por el Metro y los accesos del Aljarafe, por la peatonalización y el Metrocentro -"era partidario de microbuses ecológicos"-, por la Memoria Histórica y el carril bici y por el caso Mercasevilla. "Cuando suceda un tema de esos, hay que actuar, caiga quien caiga", dijo Zoido a lo Wyoming. Llamó a casa para decir que no llegaba a comer y se coló en el prime time del telediario.